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La vocología LGBTQIA+: más allá de la feminización de la voz

Durante las últimas décadas, hemos sido testigos de la evolución social no solo de las identidades, sino especialmente de la reacción de las sociedades ante esta revolución en lo que respecta al ámbito médico, paramédico y, por supuesto, logopédico y vocológico. 

La Vocología LGBTQIA+ abre las puertas a un despertar de las conciencias frente a la libertad identitaria, expresiva y emocional.

En esta evolución, o mejor dicho, en esta REVOLUCIÓN identitaria, el elemento más importante es, por supuesto, el ser humano, el cual desafía los dogmas y definiciones sociales sobre la expresión del género, permitiendo así una evolución identitaria mucho más libre y auténtica. Frente a esta realidad, numeroso·a·x·s profesionales de la voz, como logopedas, fonoaudiólogo·a·x·s, vocólogo·a·x·s, coaches vocales, han comenzado a implementar protocolos de intervención y metodologías adaptadas a la creciente demanda proveniente de esta diversidad, principalmente del colectivo LGBTQIA+.

El método Astudillo: de la “transexualidad” a la diversidad identitaria

En 2006, cuando obtuve mi título y mi derecho a ejercer como logopeda, no solo perfeccioné mi método presentado en mi tesis en 2006 titulada “la feminización de la voz de la mujer transexual”, sino que también me adapté a la evolución de las identidades dentro de las sociedades. Hablando varios idiomas y estando en contacto con varias culturas, como la española, la chilena, la sudamericana en general, la belga, la francesa… y muchas más gracias a mi habilidad para hablar varios idiomas, me vi rápidamente inmersa en un universo diverso y en constante evolución.

Así, mi metodología, llamada el método Astudillo, ha seguido evolucionando en cuanto al enfoque y las respuestas que ofrezco a las personas que necesitan o desean modificar su voz. Mi práctica también ha evolucionado en cuanto a la presentación del trabajo que ofrezco, a su definición y a su esencia. Por lo tanto, hoy en día hablo de VOCOLOGÍA LGBTQIA+ porque mi práctica profesional se centra en el potencial de la voz identitaria sana, principalmente relacionada con las demandas del colectivo LGBTQIA+. Además, no trabajo únicamente con mujeres trans, sino con cualquier persona que se cuestione sobre su bienestar voco-identitario y emocional, desde una insatisfacción vocal asociada a una disforia de género hasta una necesidad/deseo de explorar el potencial voco-identitario en busca de un equilibrio entre la identidad y la expresión.

Perfiles: la vocología LGBTQIA+ al servicio de la diversidad identitaria

Trabajo con innumerables perfiles que emanan de esta diversidad emergente y creciente, que solo refuerza la idea de que existen tantas identidades como seres humanos en este planeta. Estos perfiles son tan variados como las personalidades y las expresiones de estas personalidades a nivel vocal, comunicativo, emocional, etc.

La Vocología Emocional® o vocología LGBTQIA+ se presenta hoy como la respuesta más adecuada en cuanto al cuestionamiento, desarrollo, enriquecimiento y afirmación de la individualidad identitaria, ya sea a nivel vocal o a nivel global de la persona. La idea central sigue siendo la misma: apoyar el desarrollo identitario y emocional para asegurar el respeto de la autenticidad, la originalidad y la unicidad.

Esto implica necesariamente, por supuesto, el conocimiento anatómico y fisiológico del aparato fonador, pero no solo eso, ya que elementos tan sutiles y sensibles como la emoción, la personalidad, la percepción del mundo, y conceptos tan subjetivos como la feminidad y la masculinidad están en juego. Por lo tanto, siempre recomiendo recurrir a profesionales debidamente calificado·a·x·s no solo en el campo de la voz, sino específicamente en el ámbito identitario y emocional. Todo trabajo que implique una modificación de la voz requerirá la experiencia y el apoyo de un·a·x· acompañante que participe activamente en el éxito del entrenamiento vocal.

El éxito del entrenamiento vocal: experiencia profesional vs. curiosidad profesional y fracaso

Trabajé por primera vez con mujeres transexuales a los 23 años en 2005. En ese momento, todo era diferente: las mujeres transexuales eran tratadas como personas “enfermas”, con un trastorno psiquiátrico, no tenían credibilidad social, profesional, familiar o simplemente humana. Además, en lo que respecta a la voz, yo tampoco tenía credibilidad en mi campo de actividad, muy pocas personas creían en mi trabajo, a menudo era juzgada desde un punto de vista moral y, por supuesto, sufría ataques constantes en cuanto al aspecto logopédico/fonoaudiológico de mi práctica.

Sin embargo, perseveramos, tanto mis pacientes como yo, luchamos en la sombra, nos aferramos a nuestra esperanza de ver algún día una sociedad nueva en la que la identidad fuera aceptada, así como el ser humano en su diversidad y libertad de expresión. El camino no siempre fue fácil, nos sentimos solas, pero gracias a la llegada de las redes sociales y al desarrollo de la digitalización de la comunicación, finalmente pudimos ver un progreso en la visibilidad de la transidentidad y en la aceptación de la diversidad.

Nunca dejé de luchar por mis ideales, nunca dejé de militar por las ideas que creía y creo justas, teniendo como libro de cabecera los derechos humanos fundamentales, los cuales deberían ser la base vital y trascendental de cualquier relación humana.

A lo largo de estos últimos 20 años, gracias a la vocología LGBTQIA+, no solo he evolucionado profesionalmente, mi visión del mundo también ha cambiado profundamente.

Hoy en día, ser logopeda, fonoaudiólogo·a·x, vocólogo·a·x y trabajar con personas del colectivo LGBTQIA+ no implica solo tener conocimientos relacionados con nuestra propia profesión, es decir, conocimientos sobre las estructuras implicadas en la producción del habla y la voz, conocimientos sobre la anatomía, la fisiología laríngea, la respiración o el habla, conocimientos científicos basados en la evidencia, etc. Diría que para trabajar con personas que desafían cualquier visión social relacionada con la expresión de uno·a·x mismo·a·x, lo que necesitamos ante todo es tener una mente abierta sobre el mundo y su evolución, lo que nos permite ir más allá de la comprensión del individuo tal como la sociedad nos lo impone todavía en la actualidad.

Feminizar una voz, masculinizarla, modificarla a nivel identitario… no implica solo ser capaz de cambiar una nota o hacer que un discurso sea más agudo; es imperativo comprender al ser humano, comprender su lugar en una sociedad cambiante y en continua evolución, y sobre todo, comprender la esencia misma de la identidad trascendental, reina y maestra de nuestro universo.

Desafortunadamente, la curiosidad profesional ha causado, y sigue causando, mucho daño a las personas transgénero que buscan modificar su voz. Un gran número de profesionales de la voz, incluyendo a logopedas, fonoaudiólogo·a·x·s, coaches vocales insuficientemente calificados para trabajar en el campo de la voz identitaria, ofrecen sus servicios diariamente, lo que lleva a un gran número de personas a un fracaso rotundo.

Insisto mucho en mis comunicaciones, ya sea en mis redes sociales u otras plataformas, sobre esta triste realidad, advirtiendo a las personas que desean modificar su voz acerca de estos profesionales de la voz que no están capacitados y que ofrecen servicios de feminización de la voz, masculinización de la voz, etc. Por ello, es tan importante protegerse frente a la falta de experiencia y calificación de estos profesionales. Es importante entender que no todos lo·a·x·s logopedas y fonoaudiólogo·a·x·s están capacitado·a·x·s para trabajar en este campo y que la experiencia en este campo siempre prevalecerá sobre la profesión.

Somos mucho·a·x·s los que luchamos diariamente para que el trabajo de la voz identitaria sea reconocido formalmente y se ofrezca como una asignatura universitaria en las facultades de logopedia y fonoaudiología en todo el mundo. Desafortunadamente, esto aún no es así, y esa es la razón por la que la experiencia de cierto·a··x·s profesionales todavía deja mucho que desear.

Pongo mi experiencia diaria al servicio de compañero·a·x·s de profesión que desean capacitarse conmigo para responder de manera calificada y experimentada a las solicitudes relacionadas con la modificación de la voz a nivel identitario. Por lo tanto, enseño la Vocología LGBTQIA+ para evitar los fracasos logopédicos y fonoaudiológicos en el campo de la feminización de la voz, la masculinización de la voz, etc., que todavía son demasiado frecuentes en la actualidad.

Mariela Astudillo Logopeda especializada en feminización de la voz

ARTÍCULO ESCRITO POR

MARIELA ASTUDILLO

Logopeda y vocóloga especializada en voz identitaria y emocional (feminización de la voz)

Autora de la Logopedia / Vocología Emocional y del Método Astudillo

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